Piedad Urdinola, directora del DANE, explicó que el indicador IPC, que mide la inflación, fue del 5,81% en septiembre, siendo la primera vez desde diciembre de 2021 (5,62%) que el costo de vida en el país se ubica por debajo del 6%. Para esta fecha en 2023 la inflación anual era de 10,99%.
Para este mes la inflación estuvo presionada por los grupos de gastos de las familias asociados a educación (10,76%), restaurantes y hoteles (9,08%), alojamiento, agua, electricidad, gas y otros combustibles (8,49%), bebidas alcohólicas y tabaco (6,24%) y por último, salud (6,16%).
Ejemplo de ello es que algunos alimentos de la canasta familiar como chocolates y papas, observaron unas inflaciones anualizadas altas, de 61,16% y 51,65%, respectivamente. También mostraron inflaciones elevadas los dulces y confites (51,04%), las zanahorias (45,06%), los concentrados para refrescos (44,41%), y gelatinas y flanes (37,17%).
Entre tanto, las divisiones de transporte (5,61%), bienes y servicios diversos (4,05%), alimentos y bebidas no alcohólicas (2,73%), muebles, artículos para el hogar y para la conservación ordinaria del hogar (2,31%), prendas de vestir y calzado (2,22%), recreación y cultura (-0,01%) e información y comunicación (-0,76%) se ubicaron por debajo del promedio nacional.
Y es que a pesar de las protestas de los transportadores de carga por carretera a comienzos del mes pasado, el dato del IPC mensual, que fue de 0,24%, se constituyó en una noticia positiva en materia de precios, reflejando la fuerza del proceso desinflacionario que continúa avanzando en el país y que significó que, aparentemente, no hubo implicaciones sostenidas sobre los precios de los alimentos por esas jornadas de paro.
Urdinola comentó que “el paro fue muy corto, se realizó entre el 2 y el 6 de septiembre, así que analizar las afectaciones posibles en los precios es algo muy limitado”.
El ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, resaltó que por 18 meses seguidos la inflación ha estado a la baja, toda vez que en marzo de 2023 fue de 13,34%, resaltando que el rubro de transporte en septiembre apenas fue de 0,03%, lo que significó que el incremento del diésel “no generó el efecto catastrófico que se decía iba a ocurrir”.
El jefe de la cartera de Hacienda también insistió que las cifras del Dane son un llamado al Emisor para que acelere la reducción de su tasa de intervención, la cual está hoy en 10,25%, pues “Hemos bajado 753 puntos (básicos) desde entonces, y el Banco de la República solo ha bajado 300 puntos (básicos) su tasa de intervención”
El exministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, estuvo en línea con la visión del ministro Bonilla, en el sentido de que el Emisor debe reducir más rápidamente la tasa de interés para “darle aire y un oxígenos a la economía nacional”, cosa que debe ocurrir en la próxima sesión de junta directiva, a finales de este mes.
Por su parte, el director de Investigaciones Económicas de Corficolombiana, César Pabón, indicó que es una buena noticia que el IPC continúe desacelerándose y que “Ni el paro camionero ni el aumento del acpm generaron un impacto significativo. Sin embargo, los arriendos siguen mostrando rigidez y continúan siendo la sorpresa negativa”, anotó en su cuenta de X. COLPRENSA
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